La crisis que afecta a medio mundo (el otro medio lleva en crisis dos mil años) lo acapara todo. es tanta la información que sale al respecto que había intentado que este blog no fuera uno más, por eso casi no he hablado de la situación económica que vivimos y dedico mis líneas a otros menesteres con la sana intención de decirle al mundo que no todo es eso. Pero parece que no todo el mundo está de acuerdo. El otro día, en un bar, una chica me asaltó y me dijo que nunca hablaba de la crisis y que ZP no era tan bueno como yo lo describía en mis posts. Me pidió que fuera más objetivo. Así que hoy he decidido darle al presidente. Hoy trataré de decir las cosas que se han hecho mal.
- Falta de previsión. El gobierno arguye que nadie en el mundo se podía imaginar que íbamos a vivir una situación como ésta y que nadie hizo estas previsiones. Consuelo de muchos, consuelo de tontos. Habría que haberlo sabido.
- El empeño en negar la evidencia de que estábamos abocados a la crisis. Aquellos momentos en los que ZP se negaba a pronunciar la palabra maldita utilizando subterfugios sólo hicieron que ahora la gente se pregunte cuáles eran las verdaderas intenciones de esa estrategia.
- No haber hecho lo suficiente para cambiar el modelo productivo español, excesivamente centrado en la construcción. Habría que haber hecho mucho más para orientar a la economía hacia sectores más seguros, haber promovido la formación en esos nuevos nichos laborales e incentivado a las empresas. Básicamente las nuevas tecnologías, las energías renovables y todo lo que nos haga menos dependientes de los vaivenes de la economía y que nos adelante al futuro. Hemos tenido unos años de bonanza que deberíamos haber aprovechado y que hemos perdido por lo que la caída será mayor. Todavía nos queda mucho que ver.
Mañana me toca meterme con todos nosotros, que también nos toca aguantar nuestra vela.
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