miércoles, 30 de junio de 2010

Una de reflexiones absurdas y penas ahora que llega julio

- Mi sobrino de Michigan, Conrad Corretti, dice en su página de Facebook que la saga Crepúsculo es cómo el fútbol: Gente corriendo de acá para allá durante dos horas. Nadie marca y sus millones de fans insisten en que no entiendes nada. Pienso seguir viendo el Mundial y esta tarde me voy al cine con Fran Oliva a saciar nuestra sed crepuscular.
- Me da mucha pena la palabra Maxi- Cosi. Su utilidad sigue siendo un misterio que necesito resolver urgentemente.
- Este año se llevan las sandalias negras. Hoy diez testoterónicos jóvenes iban en mi avión camino de Mallorca con la misma indumentaria: Un polo azul oscuro con las banderas de Andalucía y Mallorca a un lado, un número que no se sabía si era un 10 o un 16, pantalones piratas de diversa índole y las malditas sandalias negras de esas de meter el dedo. Las odio. Menos mal que el avión aterrizó correctamente si no habría que ver a los chicos correteando por el avión con semejante zapatería.
- Osana. En los vuelos de Air Berlín entre ciudades españolas hay azafatas que hablan español.
- Me dan pena:
Los mojitos con poco hielo
Las tapas de ensaladilla con dos tristes picos
Las sillas de tijera
La presidencia española de la UE
Los grupos de música que tocan en los mítines del PP
Jugar al Kingdoms of Camelot en el Facebook

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