viernes, 5 de febrero de 2010

Desnuda por un voto


No ha prometido crear puestos de trabajo ni bajar la inflación. Tampoco la propuesta estrella de su campaña ha sido luchar contra el terrorismo. Fernanda Valencia ha ofrecido a sus electores algo más concreto: su cuerpo desnudo.
La guapa abogada y politóloga colombiana lanzó su promesa la pasada semana al asegurar en las ondas de W Radio que aparecerá sin ropa en la revista Soho si los votantes de Bogotá la eligen en marzo para ocupar un escaño en la Cámara de Representantes. Eso sí, lo hará por una "causa noble", ya que su iniciativa pretende inscribirse en el marco de las reivindicaciones feministas.
"El desnudo es el medio para transmitir el mensaje, y el mensaje es que voy a luchar por los derechos de la mujer", asegura Valencia, preocupada por la violencia doméstica en la capital colombiana: "No sé si es una herencia de nuestros ancestros españoles, pero aquí el machismo es un gran problema. El 40% de las mujeres sufre este problema en Bogotá".
La abogada de 42 años, que llegó a ocupar el cargo de viceministra de Turismo en el Gobierno Samper, "Yo no tengo ni el dinero, ni la experiencia, ni la estructura de campaña de los políticos tradicionales, así que con mis amigos y asesores empecé a buscar un boom, una forma de llamar la atención sobre mi candidatura".
Pero la promesa de desnudarse no sólo fue un acierto estratégico al que los medios no tardaron en responder con interés. También se ha convertido en una baza política para garantizar la limpieza financiera de su campaña: "Es una forma de hacer política sin tener que pactar con los caciques de barrio".
No se sabe si sus compañeros del Partido de la U comparten las denuncias de Valencia contra el modo tradicional de hacer política en Colombia. De momento, Juan Manuel Santos, presidente de la formación que apoya al presidente Álvaro Uribe, se ha mostrado tranquilo ante la iniciativa de su correligionaria: "Yo prefiero que se desnuden a que compren votos".
Valencia, que se dio a conocer presentando un programa televisivo de chismes políticos, tampoco se topó con resistencias insalvables dentro de su familia. "No ha sido fácil, sobre todo para mi padre, que es un abogado conservador. Pero tengo todo el respaldo de mi familia. Llevo casada más de 20 años y tengo un matrimonio sólido", explica la candidata, que compara su iniciativa con las campañas de las modelos para defender los derechos de los animales.
Para conocer el resultado de los comicios legislativos habrá que esperar hasta marzo, pero en todo caso la promesa electoral de Valencia no habrá sido en balde, al menos desde el punto de vista educativo: "Para mis tres hijos, mi gesto es una lección de cómo una mujer puede enfrentarse a la vida".

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Reivindicación feminista mientras se quita la ropa para calentar al machista y conseguir su voto? NO, EL FIN NO JUSTIFICA LOS MEDIOS