No quisiera hacer leña del árbol caído ni que pudiera parecer que me alegra que un medio de comunicación eche el cierre. Ni lo uno ni lo otro. Es para mi un horror tener que anunciar que un periódico cierra su edición en papel y se abren dudas más que razonables en internet, pero lo cierto es que el diario gratuito Que! saldrá impreso por última vez mañana viernes. Pero no por ser desagradable deja de ser esperada. Desde su nacimiento en 2003, jamás ha cosechado un ejercicio con beneficios, ni siquiera en la mitad de esos años, cuando el sector de la prensa gratuita diaria vivía sus mejores momentos. Y ante ese resultado, es imposible resistir si además las prespectivas que se ciernen no son nada alagüeñas.
Qué! nació como un periódico gratuito que se dedicaba más a la información de sociedad que a la política y su target estaba bastante orientado hacia un público femenino y urbano. Con una cabecera y una maquetación que bebía de Marca, intentaba hacer una cosa complicada. Con su salida y la de ADN nos topamos en las grandes ciudades con cuatro diarios gratuitos. Así somos los españoles para todo.
Al principio los grandes grupos de comunicación se pelearon con el 20 Minutos, y para la historia de la prensa quedarán esas demandas por repatir cerca de los kioscos y esas ordenanzas municipales que intentaban regular los espacios de reparto. Pero cuando vieron el éxito del rotativo tomaron una decisión: Si no puedes con tu enemigo únete a él. Y bueno, no se unieron exactamente, pero se dedicaron a abrir uno.
Pero los grandes grupos no creen en la prensa gratuita. Nunca han creido y nunca creerán. Por eso poco a poco todos han ido muriendo cuando han venido mal dadas. Los diarios gartuitos españoles no fieron creados por gente que se creyera este negocio y sus estructuras no se han adecuado a ese formato periodístico (salvando alguna excepción, claro está). Se trata de hacer el mejor producto posible con los recursos que te permita la publicidad que generes.
Conforme fueron pasando los años, el Que! fue cambiando su producto periodístico, virando hacia terrenos poco claros en su estructura de contenidos. Hoy por hoy no sabría decir muy bien a quien iba dirigido el rotativo y eso en cualquier producto es un problema.
Así que la semana que viene nos quedaremos con un sólo diario gratuito nacional, el 20 Minutos, que tendrá que convivir con ciertas experiencias locales como los Viva! y otros productos que hay en algunos territorios. Un panorama desalentador para la profesión periodística que arroja unas cifras de paro alarmantes.
Creo firmemente en que hay hueco para la prensa diaria gratuita en las grandes ciudades, y si me apuran , también en la medias. Pero esos medios deben , manejarse empresarialmente y periodísticamente desde conceptos muy diferentes a los de la prensa de pago. ¿Cuaés son? Contar eso, querido lector, forma parte de mi patrimonio. Quien quiera que se lo explique, que me contrate por horas. Soy un asesor caro pero eficiente.
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