Ayer volvió a salir la anécdota de Kruschev y sus cartas. Fue en el programa de Carlos Alsina de Onda Cero y que también se cuenta en Traffic, la película de Steven Soderberg. La historia dice que cuando Nikita S. Kruschev, allá por 1964, iba a dejar el cargo hizo llamar al
que iba ser su sustituto, Breznev, y le dio dos cartas: "cuando tengas un
problema serio con tu gobierno, que amenace tu integridad política,- le dijo-
abre la primera carta. Si de nuevo vuelves a tener problemas que parezcan irresolubles haz lo mismo con la
segunda".
El nuevo dirigente de la U.R.S.S. no tardó mucho en tener que abrir la
primera carta, Breznev se sonrió al leerla, en ella ponía:"écheme las culpas de todo". Y así lo hizo, culpó a
la politica seguida por su antecesor, los problemas parecieron solucionarse y las aguas volvieron aparentemente a su cauce.
Pero un tiempo más tarde de nuevo encontró problemas serios que amenazaban a su
gobierno, la cosa fue a más y la situación se hizo insostenible. La desesperación de Breznev era tal que decidió echar mano de la segunda carta. Al abrirla el mandatario entendió todo, en ella ponía:"siéntese y escriba
dos cartas".
El recordatorio de la anécdota venía en La Brújula de Carlos Alsina a colación de la carta escrita por el ministro de Guindos pidiendo formalmente el rescate de la banca española. No sabemos si esta misiva es la primera o la segunda aunque todos esperamos siempre que haya una bala más en la recámara. Asumido el desastre que significa tener que pedir este dinero y lo que nos va a suponer a todos me pregunto un par de cosas:
- ¿Hay que mandar cartas por correo para esto?
- La petición tiene que ser "formal"?
Parece absurdo mandar cartas al Eurogrupo cuando toda Europa conoce ya el contenido de la misma, ya que casi se la dieron redactada al ministro español. Para eso que le manden un correo electrónico.
Y ¿alguien puede decirme qué es eso de pedir "formalmente" el rescate? Si te parece pedimos 100.000 millones de cachondeo, o en la barra del bar.
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