Una canción de los 70- 80 que cantaban las Flans, luego Ole Olé y últimamente Stereo Total se llamaba "No controles". La iba a poner el día contra la violencia machista, porque en realidad el tema va de eso... Pero es que el título me viene al pelo...
Quien sabe si los controladores tienen razón en alguna de sus reivindicaciones.
A lo mejor es verdad que trabajan demasiado, incluso para alguien que cobra hasta 600.000 €.
Personalmente lo dudo.
Pero es lo de menos.
Con la que han montado.
Es lo de menos.
Una controladora aparecía sollozando en la tele diciendo que los militares habían entrado en las torres con las pistolas y les habían obligado a sentarse en los controles.
¿Qué esperaba que ocurriera?
El gobierno ya había avisado a las 9 del viernes de lo que pasaría si los controladores no dejaban su actitud.
Es lo mismo que cuando alguien entra en un banco, toma rehenes y luego se queja de que la poli entra en el edificio y los obliga a salir...
Los actos tienen consecuencias. Ya está bien de que en este país los colectivos hagan lo que les dé la gana y nunca pase nada. La actitud de los controladores era insostenible para el país y el gobierno no ha tenido más remedio que hacer cumplir la ley para desatascar una situación muy complicada.
Si los controladores quieren protestar tienen sus cauces legales para hacerlo, algo que se han saltado a la torera.
De esta crisis me quedo con varias interrogantes:
- ¿Quienes son los médicos que dieron esas bajas masivas el viernes? Alguien debe investigarlo.
- ¿Quien va a pagar el estropicio del sector turístico de las islas o de Andalucía y Valencia?
- ¿Y las pérdidas de las compañías?
- Si en las torres de control todo el mundo habla inglés, ¿Por qué no nos traemos controladores de otro sitio que cobren menos y estén el doble de contentos con su trabajo?
Los controladores, acostumbrados a controlar vuelos y vidas de las personas, se creyeron por un momento que también podían controlar al país entero. Pero el gobierno les ha cerrado la pista de despegue. Su vuelo está cancelado.
Quien sabe si los controladores tienen razón en alguna de sus reivindicaciones.
A lo mejor es verdad que trabajan demasiado, incluso para alguien que cobra hasta 600.000 €.
Personalmente lo dudo.
Pero es lo de menos.
Con la que han montado.
Es lo de menos.
Una controladora aparecía sollozando en la tele diciendo que los militares habían entrado en las torres con las pistolas y les habían obligado a sentarse en los controles.
¿Qué esperaba que ocurriera?
El gobierno ya había avisado a las 9 del viernes de lo que pasaría si los controladores no dejaban su actitud.
Es lo mismo que cuando alguien entra en un banco, toma rehenes y luego se queja de que la poli entra en el edificio y los obliga a salir...
Los actos tienen consecuencias. Ya está bien de que en este país los colectivos hagan lo que les dé la gana y nunca pase nada. La actitud de los controladores era insostenible para el país y el gobierno no ha tenido más remedio que hacer cumplir la ley para desatascar una situación muy complicada.
Si los controladores quieren protestar tienen sus cauces legales para hacerlo, algo que se han saltado a la torera.
De esta crisis me quedo con varias interrogantes:
- ¿Quienes son los médicos que dieron esas bajas masivas el viernes? Alguien debe investigarlo.
- ¿Quien va a pagar el estropicio del sector turístico de las islas o de Andalucía y Valencia?
- ¿Y las pérdidas de las compañías?
- Si en las torres de control todo el mundo habla inglés, ¿Por qué no nos traemos controladores de otro sitio que cobren menos y estén el doble de contentos con su trabajo?
Los controladores, acostumbrados a controlar vuelos y vidas de las personas, se creyeron por un momento que también podían controlar al país entero. Pero el gobierno les ha cerrado la pista de despegue. Su vuelo está cancelado.
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