Hubo una época, cuando este blog estaba actualizado al día, en que analizaba cada año el anuncio de Cerveza Damm al que llegué a comparar con el anuncio de Freixenet y sus burbujas de Navidad. rebuscando he encontrado hasta 5 entradas hablando de los diferentes anuncios que han ido haciendo a lo largo de los años: 1, 2, 3, 4, 5 Conseguir eso no era tarea fácil porque al igual que al final del año, el estío es una época marcada en negritas para algunas empresas: helados, vacaciones, refrescos, juguetes... Todos quieren hacer "el agosto" en agosto.
Y Damm había dado con una fórmula que funcionaba: Una música estupenda, una historia con pellizco y un escenario espectacular en cuyo fondo, casi sin verse, estaba su cerveza.
Pero se han venido arriba.
De un tiempo a esta parte pasaron del tema musical al corto con todos los medios posibles. Actores o actrices de renombre y director de primera fila. Los resultados son historias muy bien contadas, películas magistralmente hechas desde la interpretación y la técnica. Pero...
Pues sí. Hay un pero.
¿Y si la historia no me gusta?
A una peli, aunque sea corta, le pedimos más que a un anuncio. Y puede pasar, como es mi caso en la de 2017, que la historia no me guste. (es más, no me hace ni puñetera gracia). El resto deja de importar: los actores, de renombre, la técnica, el director y la música (¿tenía buena música la peli?).
En 2017 me pasa todo eso. y es una pena por todo lo demás.
Lo bueno que tenían los anuncios de Damm es que te anunciaban que había llegado el verano, el momento de ir a la playa y de pasarlo bien y en la historia de 2017 como mucho te dan ganas de irte a Amsterdam a llorar las penas, además está nublado y no hace 40º, ciudad en la que dudo que se puedan encontrar cervezas Damm en el supermercado de la esquina.
Un consejo a los señores de Damm: Vuelvan a la fórmula anterior: Buena música, Mediterráneo a punta pala (En España, además de Baleraes, la costa mediterránea va de Roses a Algeciras así que hay zonas para anuncios para los próximos 100 años: Propongo Bagur, Denia, Cabo de Gata, Mazarrón...) y una historia menos complicada de asimilar, que para malos tragos ya tenemos nuestra vidas y no nos hace falta "La Vida Nuestra".
Siento el zasca.