Como ya comenté el mismo lunes, un año más se celebró la III Gala de los Premios Blogosur a los mejores blogueros de Sevilla y a los mejores tuiteros de la ciudad y la provincia. Al éxito organizativo del evento y al perfecto encaje por parte de la organización en el ritmo de la gala, hay que destacar la comprobación in situ, de la buena salud que goza Sevilla en cuanto al número y la calidad de blogs y tuiteros que pueblan nuestra tierra. Esa buena salud contrasta con el negro panorama de los medios de comunicación, donde todos andan /mos buscando rentabilizar nuestras publicaciones antes de que sea demasiado tarde. Todos estamos buscando el dinerito visto que la "paguita" se ha escapado para siempre.
Algún sesudo analista me comenta que los blogs y los tuiteros tienen la ventaja de no tener una absoluta necesidad comercial. La gente escribe un blog, en su mayoría, por amor al arte, o al tema que trata, como elemento de visibilidad personal o colectiva o simplemente para que sus cuatro amigos le digan lo bien que escribe. Eso es verdad, pero sin una base económica sólida, los "hobbies" lo mismo que se tienen, se dejan de tener. Sin obligación el futuro es más incierto. Pasa lo mismo con los tweets. La única manera de darle a eso la capacidad de perdurar en el tiempo es darle carácter empresarial y para que ocurra hay que darle inversión e ingresos. ¿Y dónde están los ingresos de un blog o de una cuenta de Twitter? Anda que si lo supiera te lo iba yo a contar aquí así "de gratis". Que te cuente eso vale un dinerito. Hago facturas.
Si los medios son capaces de recoger el ingenio, el talento y las ganas de trabajar que tienen tuiteros y blogueros y los ponen al servicio de cabeceras de referencia quizás ambos obtengan los beneficios que esperan. Para otro post dejo el flujo cesante que suponen esas cuentas de Twitter y esos blogs para las empresas privadas que buscan repercusión de su marca.
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